Toyota lleva 14 años vendiendo más coches que nadie. Ahora tiene un plan para comerse la tostada de los comerciales europeos

Toyota volvió a ser en 2023 el fabricante de coches más grande del mundo, con 9,07 millones de unidades vendidas en todo el planeta, un 4,1% más que el año pasado. Con esos resultados, Toyota lleva 14 años consecutivos liderando el mercado de turismos, pero quiere más.

La marca japonesa es consciente de que todavía puede seguir creciendo y cree que el mercado de vehículos comerciales es una buena opción para ser aún más grande. En el caso de España en concreto, el 15% de las ventas totales de vehículos se corresponden con comerciales; hasta ahora, Toyota se conformaba con un pequeño trozo del pastel, pero eso se ha acabado.

Una gama de cuatro modelos, todos electrificados, incluida la Hilux

Toyota Hilux Mild Hybrid.

El plan que tiene Toyota para multiplicar sus ventas en el mercado de comerciales europeo (incluyendo el mercado español) es simple: sacar músculo. Por lo pronto, ha invertido en Europa más de 1.000 millones de euros en el proyecto de Toyota Professional, una marca que se lanzó en 2019 y que cinco años después pretender ser tan grande como para plantar cara los pesos pesados del sector, entre los que están Stellantis, Volkswagen y Ford.

Precisamente su alianza con Stellantis ha permitido a Toyota Professional tener una gama que cubre todos los segmentos del mercado de comerciales. En el de los CDV, el que acapara el 47% de las ventas totales de comerciales en España, la marca japonesa tiene la Toyota Proace City.

En de los MDV, que representan el 20% de las ventas, está la Toyota Proace y ahora se acaba de incorporar a la gama la Toyota Proace Max para llegar a la categoría CDV, cuyas ventas representan el 22% del total de comerciales.

Toyota Proace.

El resto de ventas se corresponde con las pick-up y Toyota está representada en esta categoría con uno sus modelos más legendarios: la Toyota Hilux. En España, más de la mitad de las pick-up que se venden son Hilux y parte del plan de Toyota para conquistar el mercado de comerciales pasa, precisamente, por la Hilux.

Toyota acaba de renovar su pick-up, entre otras cosas, para introducir una mecánica diésel micro híbrida con la etiqueta ECO de la DGT. Esta nueva motorización es, en esencia, el bloque turbodiésel de cuatro cilindros y 2.8 litros que ya conocíamos combinado con un sistema micro híbrido con red eléctrica de 48V.

Además de estrenar este motor, la Hilux pasa a estar disponible con el nuevo acabado GR Sport II. Con esta terminación, visualmente es una pick-up mucho más bestia, con 2 cm más de altura libre al suelo, un eje trasero hasta 15 cm más ancho, llantas específicas, paragolpes más agresivos, aletines en los pasos de rueda y detalles exclusivos de GR en el interior. Es la respuesta de Toyota a la Ford Ranger Raptor.

Interior de Toyota Proace con sistema Smart cargo.

También se acaban de renovar las Toyota Proace y Proace City. En ambos modelos cambia el frontal y el interior está más digitalizado, además de ofrecer una mayor conectividad. Otra de las novedades es que ambas están disponibles con el sistema Smart cargo, que es una compuerta que une el habitáculo con el espacio de carga por debajo del asiento del pasajero para transportar cosas de hasta 3,5 metros de largo.

Asimismo, la Proace City eléctrica ofrece 50 km más de autonomía que antes, hasta llegar a los 330 km, mientras que la Proace puede recorrer hasta 350 km entre cargas con la batería de 75 kWh, es decir, 20 km más que antes.

La otra novedad es la Toyota Proace Max. Hasta ahora, Toyota Professional no ofrecía ningún modelo comercial tan grande. Llega con seis configuraciones diferentes de carrocería que abarcan tres longitudes y tres alturas distintas, desde H1 L2, con 10 metros cúbicos de capacidad de carga, hasta H3 L4, con 17 metros cúbicos y la capacidad de llevar hasta cinco europallets.

La Proace Max está disponible con un motor diésel de 2.2 litros con tres niveles de potencia: 120 CV con cambio manual, 140 CV con cambio manual y 180 CV con cambio automático de ocho relaciones. Esta versión diésel se fabrica en Italia.

También hay una variante eléctrica que se fabrica en Polonia, tiene 270 CV y una batería de 110 kWh con la que puede recorrer hasta 420 km entre cargas. En corriente alterna puede cargarse a 11 kW y en corriente continua a potencias de hasta 150 kW.

Pero la inversión de Toyota para hacer crecer su división Toyota Professional en Europa no solo pasa por renovar y ampliar su gama. Parte del esfuerzo de la marca japonesa va dirigido a reforzar su red de concesionarios y servicios oficiales, denominados Toyota Professional Centre.

Toyota Proace City.

En todos los concesionarios de Toyota se pueden encargar los cuatro modelos comerciales de la gama Professional y hay 25 Toyota Professional Centre repartidos por España. Estos centros se han preparado para poder dar cobertura a la Proace Max, con techos más altos, entre otras cosas.

El objetivo de Toyota es que estos centros ofrezcan un mínimo tiempo de reparado (o de mantenimiento) para que el vehículo vuelva al trabajo lo antes posible. Por eso, también tienen un horario especial (abren desde las 7 hasta las 19 horas), cuentan con stock de recambios, vehículo de sustitución, técnicos específicamente formados para estos vehículos y un servicio de mantenimiento express.

Otra de las cuestiones en las que hace hincapié Toyota es en la posibilidad de ofrecer a sus clientes prácticamente cualquier cosa. Hay todo tipo de opciones disponibles a la hora de configurar sus vehículos comerciales, desde conversiones en vehículo frigorífico hasta adaptaciones para personas con discapacidad.

Luchar contra Stellantis en el mercado de los vehículos comerciales es un reto enorme, pero Toyota tiene el músculo necesario para hacerlo y los 1.000 millones que ha invertido en su división Professional son toda una declaración de intenciones.

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