La DGT austriaca se ha puesto muy seria con los conductores que no cumplan con los límites de velocidad: desde hoy 1 de marzo además de la multa pertinente, confiscan el coche. El cambio que modifica la normativa de circulación se aprobó el verano pasado y entra en vigor ahora.
Se aplica en tanto en cuanto se supere el límite, como aquí en España que a partir de cierta velocidad pasa a ser delito. La administración de Tráfico austriaca estima que, con esta medida, las incautaciones de vehículos podrían ser más de 400 al año.
Sin coche durante 14 días o para siempre, según lo rápido que vayas
Este nuevo castigo no siempre se aplica y además la incautación del vehículo puede ser temporal o permanente. Que caiga uno u otro castigo depende de lo rápido que fuera el infractor. O más concretamente en cuánta velocidad se supere el límite fijado en la vía, ya sea en ciudad o fuera de ella.
El coche o vehículo será incautado durante 14 días en caso de:
- Superar en más de 60 km/h el límite en carreteras urbanas.
- Superar en más de 70 km/h el límite en carreteras interurbanas (carreteras convencionales, autopistas y autovías).
Y la incautación del coche será permanente cuando:
- Se rebase el límite de velocidad en más de 80 km/h en ciudad.
- Se rebase el límite de velocidad en más de 90 km/h en vías interurbanas.
No obstante, la retirada del coche también será permanente en el primer caso, superar en 60 o 70 km el límite en ciudad o fuera de ella, si el conductor es reincidente en superar en dicha velocidad los límites o bien si se le ha retirado el carnet en algún momento en los últimos cuatro años.
Los coches incautados, dado el caso, serán subastados por la administración: un 70 % del montante obtenido irá destinado al Consejo Austriaco de Seguridad Vial y un 30 % a la administración local, que corre con los costes judiciales. A esto se añaden las multas, que oscilan entre los 500 y 7.500 euros, según la gravedad de la infracción.
Esto se traduce en que si por ejemplo en una vía urbana de 50 km/h se circula a más de 110 km/h, el infractor puede quedarse sin coche unos días. O bien para siempre si hace lo propio a más de 130 km/h. En una autovía de 120 km/h, la primera pena se aplicará en caso de ir a más de 190 km/h y la segunda si se circula a más de 210 km/h.
Si el coche es del alquiler, o bien si el propietario del coche no es el infractor, la retirada del coche será temporal, pero se prohibirá de forma expresa que el infractor vuelva a conducir ese modelo de coche en concreto.
En España sólo sin carnet cuando es delito. Aquí las multas de velocidad son exponenciales según superemos el límite: la sanción máxima es de 600 euros y de 6 puntos, que se aplica cuando se rebasa la velocidad en más de 50 km/h en ciudad o en más de 70 km/h fuera de ella.
No obstante, pasa a ser delito siempre que en ciudad se supere el límite en más de 60 km/h o bien en más de 80 km/h en convencionales, autopistas y autovías fuera de ciudad. En este caso se aplican penas de prisión de tres a seis meses (aunque lo normal es que no se aplique ya que hay que tener antecedentes), multa y la retirada del carnet entre más de un año y hasta cuatro.
Además, ya se está preparando una nueva normativa a nivel europeo para castigar más duramente a los que vayan demasiado rápido con la retirada del carnet de conducir. Esto se aplicaría en todos los países de la Unión Europea y no sólo donde se cometió la infracción, como normalmente ocurre ahora.
Barajan la suspensión del permiso cuando se supere en 50 km/h el límite en autovías y autopistas y en 30 km/h en ciudad. Si se aprueba, ya que debería armonizarse en todos los países miembros, las sanciones en España serían más estrictas que las actuales. Sea como fuere Austria se ha adelantado a estas penas más duras y hay que tenerlo en cuenta si vamos a circular por las carreteras de este país.