Sebastian Vettel, suma y sigue. Nueva victoria en el Gran Premio de Alemania

Ni una curva hemos tardado en ver la demostración del dominio de Red Bull en esta parte del campeonato. Lewis Hamilton, poleman, no plantaba cara a los monoplazas de Milton Keynes y por desgracia para el, la carrera no le aportaría mucho más. Vía libre para los chicos de la bebida energética y sobre todo para un Sebastian Vettel que tenía unas ganas especiales de vencer en el gran premio de casa. Y así se ha confirmado.

Con los Red Bull por delante, sorprendente la buena salida de un Mark Webber especialista en pifiarla, el primer eliminado llegaba en la vuelta cuatro cuando Felipe Massa sufría un trompo en la primera curva. A falta de más información, todo parece indicar que su abandono ha sido causado por problemas en el motor.

Poco después, comenzaba el baile en boxes. Aquí es cuando se iba a decidir la carrera ya que con Alonso con una estrategia distinta, había posibilidad de que el asturiano aspirara a la victoria. Pero antes de todo eso, Red Bull sería protagonista de un incidente que podría haber sido trágico.

A Mark Webber le daban el OK para salir de su box cuando la rueda trasera derecha no había sido fijada. La rueda no tardaba en salir volando impactando con un cámara presente en el pit-lane. Por suerte, la rueda impactaba contra el cuerpo ya que de hacerlo contra la cabeza el desenlace podría haber sido terrible. De momento, el cámara está en observación.

Esas primera paradas servirían para posturlar a los dos Lotus, los de Kimi Räikkönen y Romain Grosjean como candidatos a la victoria. Pero antes de decidirse el triunfo, volveríamos a tener un momento trágico-cómico. Jules Bianchi aparcaba su Marussia con el motor ardiendo y tras apagarlo los comisarios, el monoplaza, sin ningún calzo que hiciese de tope, comenzaba a rodar marcha atrás cruzando por completo la pista ante la atónita mirada del conductor del tractor-grúa que en esos momentos llegaba a retirar el monoplaza.

La salida del safety-car aclaraba la situación. Las distintas estrategias se aclaraban. Vettel veía como su cómoda distancia en el liderato se desvanecía mientras que por detrás Grosjean y Räikkönen se le acercaban. Quizás un paso por detrás, Fernando Alonso se encontraba a las puertas del podio-

Pero antes de dar por concluida la carrera, aún quedaba un bloque de paradas. Grosjean era el primero en parar, seguido por Vettel. Ambos ponían neumáticos duros contrariamente a lo que hacían sus rivales, Räikkönen y Alonso. Favorecidos por unos neumáticos más rápidos, el finés no tardaba en adelantar a su compañero buscando la victoria mientras que Alonso se lanzaba a por el podio. No podía ser y ambos se tenían que conformar con la segunda y cuarta posición.

Sebastian Vettel se hacía con la victoria en el Gran Premio de Alemania, la primera en casa de las treinta que ha conseguido en la Fórmula 1. Un reglao perfecto a su 26º cumpleaños celebrado esta misma semana. El alemán afianza su liderato y si hace siete días no llega a abandonar en Silverstone, hoy estaríamos hablando de un título casi en el bolsillo.

Más información en Motorpasión F1

También te puede gustar

Portada de Motorpasión

Ver todos los comentarios en https://www.motorpasion.com

VER 13 Comentarios