Bandera a cuadros: Gran Premio de Hungría

Para tratarse de una carrera tradicionalmente aburrida, el Gran Premio de Hungría de esta temporada nos ha dejado una cantidad importante de material para analizar con calma. De entrada, me gustaría destacar el soberbio papel de Jaime Alguersuari en su debut, ya que ha sido el primero en dar el salto desde “La cantera” al “Bandera a cuadros”.

Apenas acumulaba 300 kilómetros en línea recta a bordo de un monoplaza. Había tenido relativamente poco tiempo para preparase a conciencia. La carrera más larga que había disputado en su vida había durado unos 45 minutos. El Hungaroring es un circuito físicamente durísimo, sin apenas rectas para descansar y con unas temperaturas altísimas. Vaya, que todo apuntaba a que, o bien estaría muy lejos de los tiempos de su compañero, o lo veríamos cometer errores en la siempre difícil tarea de entender las complicadas gomas de F1 y llevar el conjunto al límite. Pero sucedió todo lo contrario.

Como si de todo un veterano se tratara, Jaime hizo gala de una de sus grandes virtudes, la madurez, y ajeno a la presión que tenía sobre sus espaldas después de oír las críticas de muchos de los pilotos de la actual parrilla por su precocidad, supo gestionar a la perfección el fin de semana para, sin cometer ni un sólo error, ir mejorando vuelta tras vuelta, aprendiendo de cada curva, y llevando el límite un poco más allá en cada kilómetro recorrido. El premio no fue sólo completar las duras 70 vueltas de carrera, sino hacerlo entrando por delante de su compañero de equipo, que sí cometió errores. Ahora en Toro Rosso creen que en un par de carreras Jaime estará para entrar en la Q2. Si sigue con esta progresión, creo que es más que posible.

Fue realmente sorprendente y agradable ver nuevamente a McLaren y Ferrari en lo más alto, disputándose, por ponerle un poco de emoción a la cosa, una victoria. Ya habíamos dicho en el análisis de mitad de temporada que la sensación era que Ferrari, McLaren y Renault estarían bien pronto arriba nuevamente, y en Hungría no hizo más que confirmarse por completo este extremo. Llegan en un momento crucial del campeonato, y seguro que darán mucho que hablar de aquí a final de temporada, robando puntos importantísimos a los que se están jugando el título (¿verdad, Webber?).

Por matizar lo dicho en el párrafo anterior, que quede claro que la disputa por la victoria de la carrera no existió. Lewis Hamilton hizo una carrera extraordinaria, tirando a tope cuando tocaba, y pudiendo conservar motor cuando se percató que había sacado un mundo a sus perseguidores. Que Pedro De La Rosa reconociera que el McLaren era mejor coche que antes, pero no tanto, nos da buena muestra de lo que puso de su parte Lewis para hacerse con una contundente victoria. Había muchas ganas de volver a ganar, y se notó en la celebración posterior.

Tras este renacimiento de McLaren y Ferrari, que parece que por fin han conseguido superar los inconvenientes del KERS para lograr un buen comportamiento dinámico del monoplaza, tendremos a partir de ahora un nuevo factor a tener muy pero que muy en cuenta: viendo como salen los monoplazas con KERS (están ganando del orden de 3 o 4 posiciones por salida) y lo complicado que resulta adelantarlos posteriormente, podrán salir a la Q3 más cargados de combustible para proteger también su estrategia en carrera, ya que las plazas que puedan perder en parrilla por ir más cargados las ganarán fácilmente en la salida, y luego será muy complicado adelantarles. Parece que el KERS puede empezar a tomar sentido (siempre que no lo lleven todos los coches, claro).

En lo que se refiere a la lucha por el título, ya hemos bajado la barrera psicológica de los 20 puntos. El liderato de Jenson Button está en serio peligro, y no podemos olvidar que Jenson ha cedido 15 puntos de su amplísimo colchón en las últimas tres carreras. Es realmente sorprendente el bajón de Brawn. Lo que está sucediéndole al equipo británico no es que se haya estancado y el resto les haya cogido. El Brawn está sufriendo mucho con las gomas, y no hay manera de hacerlas funcionar como al principio de temporada, ni con mucho frío, como en Silverstone o Nurburgring, ni con menos frío, como en Hungría. Si no detectan rápidamente de dónde ha nacido este problema de graining en las gomas traseras que las acaba destrozando en un plis (¿alguna de las dos nuevas actualizaciones?), se les pueden escapar dos títulos que tenían en el saco.

Por acabar sin dejarme nada, me gustaría destacar varias cosas rápidamente. Primero, que estamos rozando insistentemente la tragedia. Hace dos años con Kubica, el pasado con Kovalainen, y el sábado con Massa. Esperemos que se recupere pronto, y acabe esta agonía. Si Kimi fue capaz de hacer segundo, tal y como está últimamente, a lo mejor Massa hubiera sido capaz de dar algo de guerra a Lewis. Segundo, Fernando Alonso no tiene nada de suerte en Hungría, primera victoria al margen. La pole era a costa de muy poca carga de combustible, y la victoria era imposible, pero el podium hubiera sido factible, sobre todo tras ver los fallos en los repostajes de Webber y Raikkonen. Tercero, la FIA vuelve a hacer de las suyas con una exageradísima sanción a Renault que parece seguir un criterio totalmente subjetivo, y, por qué no pensarlo, con sabor a venganza hacia Flavio Briatore, el gran defensor del campeonato paralelo. Vergonzoso. Por cierto, ¿por qué narices la FOTA no pidió la cabeza de Mosley de inmediato? ¿Para qué aguantar a este impresentable hasta octubre? Cuarto y último, parece que Williams y Toyota siguen aguantando el tirón, con grandes carreras de Rosberg y Glock, especialmente. ¡La zona de puntos está apretadísima!

También te puede gustar

Portada de Motorpasión

Ver todos los comentarios en https://www.motorpasion.com

VER 0 Comentario