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Las rutas para perderse por los pueblos de Madrid y no volver nunca a la capital

Conocer Madrid es mucho más que conocer una capital cosmopolita, llena de vida, multicultural y receptora de todos los países que pasan por allí.

En Madrid no todo se ciñe a la capital, existen algunos pueblos de esos que llamamos con encanto, parados en el tiempo, que en menos de 100 kilómetros a la redonda atesoran ese entorno natural extraordinario.

Nos vamos a ver ocho rincones singulares, que son todo una llamada a alejarse del mundanal ruido y cuya riqueza no tiene precio, donde silencio y aire limpio conviven a parte iguales.

Muchos echaréis en falta otros lugares igual de singulares, como la monumental Torrelaguna, cuna del cardenal Cisneros o Patones de Arriba, un pintoresco pueblo que aún conserva ese aspecto medieval, por citar algunos ejemplos que bien merecen la pena un viaje. Para perderse y olvidarse de la capital podríamos escoger un gran número de sitios, de ahí que hoy la selección se centre en los siguientes.

Montejo de la Sierra

Situado en plena sierra norte de Madrid a unos 100 kilómetros de la capital (94 kilómetros para ser exactos) se encuentra uno de los tesoros escondidos de la región, lejos de la contaminación y las prisas de la capital. Se trata de Montejo de la Sierra, un municipio de 374 habitantes, cuyo enclave en la Sierra del Rincón —paraje natural declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO— guarda un rincón natural único: el hayedo de Montejo.

El hayedo de Montejo muestra un camino singular, donde las hayas se van abriendo paso y desplazando a lo demás árboles y que presenta un aspecto dorado, debido al polvo de mica que se ha depositado allí

A unos cinco kilómetros del centro de este pueblo, salpicado por casas de piedra y colores ocres, tras circular por una carretera estrecha se encuentra esta joya de la naturaleza.

Las hayas, protagonistas de este bosque, junto a los acebos y robles, crecen en la umbría ladera que da fin al río Jarama y cuyo paso dibuja la frontera con Guadarrama.

Este acogedor pueblo de montaña, que basa su economía en la ganadería y el turismo rural, cuyo hayedo lo compró a un noble de Sepúlveda, bien merece dejar la gran ciudad a quien busca un entorno diferente, natural y lleno de encanto.

Cómo llegar

Desde Madrid, por la A-1 (Autovía de Burgos), toma la salida 76 (Gandullas-Piñuecar), donde se enlaza con la M-137, carretera, que tras unos 10 kilómetros aproximadamente, te conducirá hasta Montejo de la Sierra.

Existen otras rutas alternativas, que puedes tomar también desde la A-1 para conectar con distintas carreteras secundarias que te llevan a este municipio, aunque esta es la más sencilla.

La Hiruela

La Hiruela

Lleno de sosiego y también ubicado en la Sierra norte, a unos 104 kilómetros de la capital, se oculta un pueblo, que invita a huir de la velocidad de la vida moderna. Una aldea del siglo XI, cuyos 55 habitantes, lucen con orgullo el ser el último reducto de la tranquilidad.

Su llegada es a través de una estrecha y sinuosa carretera en la que es habitual encontrarse con algún que otro vehículo en sentido inverso. Una vez allí, notarás que el esfuerzo merece la pena. Caminar por su calles es como retrotraerse en el tiempo.

Situado en plena sierra del Rincón esta aldea de 55 habitantes que data del siglo XI, tiene prohibido los coches durante el fin de semana

Las casas de piedra gneis (roca metamórfica compuesta por los mismos minerales que el granito) y adobe mantienen la misma estética de la Edad Media en esta aldea del siglo IX.

Su entorno privilegiado en esta localidad, también enclavada en la Sierra del Rincón, que desprende un aroma a tilos, la convierte en un sitio de los merece la pena quedarse.

Las rutas de senderismo harán las delicias de loa amantes de la naturaleza. Hay cuatro sendas recomendadas para visitar: senda de los oficios de la vida, que recorre de lleno la memoria sentimental de La Hiruela; la senda de molino a molino para conocer la variedad de frutales; las Eras y Pila de Riego en la que contemplar unas espléndidas vistas de la aldea o el camino de la Fuente Lugar, impregnado de abedules y cerezos.

Por cierto, para entrar en el pueblo hay que aparcar el coche en la entrada, salvo los sábados y festivos, que no esta permitido el tráfico. Pero merece la pena dejar el coche y embriagarse de los encantos de este lugar.

Cómo llegar

Continuando por la misma M-137 que nos lleva hasta Montejo de la Sierra.

Castillo de los Mendoza en Manzanares el Real

Manzanares el Real

Un lugar de cine, así es como se puede definir esta población situada a unos 50 kilómetros de Madrid y ubicada en el Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares, dentro de la Red Mundial de Reservas de la Biosfera.

La caída del imperio romano, Alejandro Magno, El Cid Campeador, Conan el Bárbaro o Coraza Negra, son sólo algunos films que se han filmado con su afamado castillo de fondo.

Rodeado por el río que lleva su nombre y por La Pedriza, los 8.309 habitantes gozan de un sitio plagado de monumentos históricos con la Sierra de Guadarrama de fondo.

El Castillo de los Mendoza es una de las paradas preferidas de los turistas que visitan este municipio, ubicado en el parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares

Nada más llegar nos recibe el castillo de Mendoza, primera parada que suelen hacer los turistas. No es para menos, en una fortaleza como esta, una de las más importantes de la arquitectura militar castellana del siglo XV y una de las ciudadelas mejor conservadas de España.

Construido sobre una ermita de estilo románico-mudéjar en honor de Santa María de la Nava, fue residencia de una de las familias más poderosas de Castilla desde la Edad Media como era Los Mendoza.

Bajando la colina en la que se sitúa la fortaleza se puede pasar por la iglesia de Nuestra Señora de las Nieves, fundada a principios del siglo XIV.

Otro lugar por los que merece la pena pasarse es el puente de la Cañada Real Segoviana, cuya construcción se remonta a la fundación de la vía en el siglo XIII y que fue paso obligado para desplazar el ganado por España. De hecho, fue una fuente importante de ingresos.

La Pedriza es otro de los entornos que merecen una visita, sobretodo para escaladores y senderistas, que tienen disponibles alrededor de 1.000 vías de escalada de todo tipo de dificultad

Disfruta recorriendo el pueblo pasando por sus calles y su Plaza del Pueblo, donde se encuentra ubicado el ayuntamiento.

La guinda a tan bello entorno lo pone es batolito granítico ubicado en la variante sur de la Sierra de Guadarrama como es La Pedriza. Su nombre viene por la irregular erosión de la roca, cuya formación es de interés geológico mundial.

Prepárate para insuflar en tus pulmones aire puro y disfrutar, si te apetece escalar. Dispones de nada menos que 1.000 vías de escalada de todo tipo de dificultad y diferentes alturas que ofrece al visitante tan singular enclave. Las pozas de La Pedriza han sido piscina de los madrileños durante siglos. Sin embargo, desde el pasado mes de junio la Comunidad prohibió el baño en las citadas charcas del rio Manzanares con multas que pueden alcanzar hasta los 3.000 euros.

Debes prestar atención al acceso al parque, pues no solo está restringido a determinadas horas sino que también se ha reducido el acceso en coche.

Cómo llegar

Por la M-607, a la altura de Colmenar Viejo en el km.5, toma a la izquierda la desviación que te indica el camino hacia Manzanares El Real por la M-862.

También puedes ir por la A-6 hasta la salida 39, en la que cogerás la salida de Morazarzal y aquí por la carretera M-680, pasando por Cerceda hasta Manzanares El Real.

Por último, desde la A-1 a la llegada a Venturada, coger la dirección oeste por la M-608, que tras Guadalix y Soto del Real, te llevará hasta este municipio madrileño.

Pantano de San Juan en Pelayos de la Presa

Pelayos de la Presa

Como si de un pueblo costero se tratara, en la Comunidad de Madrid hay pueblos que sin haber playa puede encontrarse algo parecido, incluso con veleros amarrados no muy lejos. Tal es el caso de Pelayos de la Presa y su Pantano de San Juan, ubicado a un kilómetro escaso de esta localidad situada al suroeste de la Comunidad.

Aparte de Pelayos, las localidades de Navas del Rey y San Martín de Valdeiglesias comparten en el pantano el único lugar autorizado para el baño y embarcaciones de motor en la Comunidad de Madrid. La parte del pantano que le corresponde a Pelayos es la extensión conocida como El Muro, la presa y el terreno que ocupa el restaurante Monasterio.

El monasterio cisterciense de Santa María la Real de Valdeiglesias es una de las joyas arquitectónicas, cuyo claustro, iglesia y muros, aún tratan de mantenerse en pie

Curiosamente este municipio de 2.502 habitantes, cuyos orígenes datan del siglo XIII, no toma el nombre de la presa, sino del arroyo de la presa.

Una de las joyas arquitectónicas del entorno es el milenario monasterio cisterciense de Santa María la Real de Valdeiglesias, fundado en 1150, el más antiguo de la comunidad, aunque se encuentre en ruinas.

Pueblo de lutieres, nada menos que cinco, quienes a golpe de sierra y gubia tallan este instrumento de cuerda como es el violín.

Cómo llegar

Desde la A-5 por el Paseo de Extremadura hay que tomar la salida hacia Boadilla por la M-502. En la rotonda, toma la segunda salida en dirección a la M-511 y una vez que pases dos rotondas más, toma la segunda salida para incorporarte por la M-501 en dirección Boadilla del Monte.

Continúa por la M-501, ahora Autovía de los Pantanos por el ramal en dirección dirección Brunete/San Martín de Valdeiglesias. Continúa por la M-501 pasando por Chapinería y Navas del Rey. Precisamente en este último municipio acaba la autovía.

Sigue por la carretera convencional en dirección a San Martín de Valdeiglesias y cuando llegues a una rotonda en la que hay una gasolinera, gira a la derecha por la dirección que indica Pelayos de la Presa.

Chorrera de Los Litueros (Arroyo del Caño) en Somosierra

Somosierra

Solitario y alejado del mundanal ruido se encuentra el último pueblo de la Comunidad de Madrid por el flanco norte donde la autovía parte en dos este pequeño municipio, ubicado a 93 kilómetros de Madrid y situado en el puerto de montaña que lleva el mismo nombre.

Basta con acudir allí y darte cuenta lo que es este pueblo donde todos se conocen. No es para menos con una población de apenas 40 habitantes, que en verano se duplica.

El monumento más singular del pueblo es la Ermita de nuestra señora de la Soledad, que data de principios del siglo XVIII. En su fachada se encuentran placas en memoria de los españoles y polacos que dieron su vida por Somosierra, contra los franceses en 1808.

En sus alrededores se encuentran los verdaderos encantos de este municipio como el Pico Tres Provincias, cuyo único acceso es desde el Puerto de Somosierra. Un sitio que ofrece rutas recomendables para todos los niveles

Construido a la vera de lo que fue el Camino Real que unía la meseta con la capital del reino, es tradición durante la visita coger una estampita de la Virgen o de San Cristóbal, patrón de los viajeros.

Si eres un amante del senderismo o de la montaña en los alrededores del pueblo encontrarás los verdaderos encantos del mismo. El pico Tres Provincias cuenta con rutas recomendables. Su único acceso es desde el puerto de Somosierra. También conocido como Peña Cebollera, el nombre de este pico de 2.129 metros de altura se debe a las vistas que confluyen en su cima: Madrid, Guadalajara y Segovia.

Cómo llegar

Desde Madrid por la A-1 hasta el puerto de Somosierra.

Plaza Mayor de Chinchón

Chinchón

Si algo tiene este municipio que te deja impregnado es su plaza Mayor, considerada como una de las más bellas del mundo y declarada en 2008 como unas de las siete maravillas del patrimonio de la región.

A pesar de que las enrevesadas callejuelas nos lleven a los siglos XVIII y XIX, los orígenes de esta localidad de 5.447 habitantes datan del siglo XIV.

Su casco urbano, declarado en 1974 conjunto histórico artístico, recoge acontecimientos interesantes de las Guerra de la Independencia. De hecho, en la Casa de la Cadena durmió Felipe V. Incluso las balconadas de madera recuerdan los tiempos en los que parte de este pueblo ardió bajo las llamadas de la invasión napoleónica.

Su Plaza Mayor, que se utiliza como plató de cine y coso taurino, está considerada como uno de las maravillas patrimoniales de la región

Según narran las crónicas de la época, aquí perdieron la vida cuatro soldados franceses. Y las tropas napoleónicas decidieron tomarse la justicia por su mano saqueando y quemando los numerosos monumentos de Chinchón. Uno de estos fue la Iglesia de Nuestra Señora de Gracia, pegada a la Torre del Reloj, que también se incendió, aunque logró conservarse. De ahí aquel dicho que reza: “Chinchón tiene una torre sin iglesia y una iglesia sin torre.

Las tropas napoleónicas quemaron también la Iglesia de Nuestra Señora de la piedad, aunque el pueblo no sólo decidió restaurarla sino que la adornó con el cuadro “La Asunción de la Virgen”, obra de uno los mejores pintores de la época como era Francisco de Goya. Precisamente el nombre de ese cuadro, expuesto en el altar mayor, es el que da su nombre actual a esta iglesia de Nuestra Señora de la Asunción.

Entre los tesoros que guarda este municipio madrileño se encuentra el castillo de los Condes, que data de finales del siglo XV

Este no es el único tesoro que guarda Chinchón, pues también se encuentra el Castillo de los Condes, del siglo XV. Aunque la joya de la corona de esta localidad es su plaza Mayor, de estilo castellano y que fuera construida por sus propios habitantes, tras edificar el Ayuntamiento en 1499. A partir de ese momento los vecinos construyeron sus casas alrededor y no sería hasta el siglo XVII cuando la plaza quedaría cerrada.

De allí es muy recomendable su anís, que lleva su propio nombre y que se fabrica de manera tradicional; además de sus ajos finos y su gastronomía.

Cómo llegar

Desde Madrid por la A-3 hasta el Puente de Arganda, donde encontraremos un desvío señalizado hacia la derecha por la carretera M-311, que pasa próxima a Morata de Tajuña, en un trazado sinuoso en sus últimos tramos que nos lleva a Chinchón.

También por la A-4 hasta el cruce con la carretera M-404 Navalcarnero-Chinchón, que pasa por Ciempozuelos y Titulcia. Existen otras vías de acceso a través de los pueblos limítrofes. Por último, por la R-3 a la altura de Perales de Tajuña.

Iglesia de San Nicolás de Bari en Villaconejos

Villaconejos

Bajo una arquitectura irregular que combina edificios nuevos de ladrillo visto con casas nuevas de diferentes alturas en la que destaca la iglesia y la bella ermita de Santa Ana, se encuentra Villaconejos.

La historia de este pueblo, que nació de la donación de terreno de Chinchón, Aranjuez y Colmenar de Oreja, va estrechamente ligada al melón. Tanto es así que hoy en día algo más de la mitad de las familias de Villaconejos, que tiene una población de 3.500 habitantes, se dedica a la siembra de este fruto.

A parte de contar con inmuebles de cierto valor arquitectónico, con recuerdos, fotos y utensilios de las familias que se dedicaban a la siembra de este fruto

Te preguntarás ¿por qué melones? Porque es rica en potasa, un mineral que le otorga dulzor a sus frutos. La historia comienza con una variedad de melón que trajo en 1.900 un soldado del norte de África como es el melón negro. En la actualidad esta especie ya no se utiliza y los melones de éxitos son Piel de Sapo, Tendral y Mochuelo.

Tan importante es este fruto para el pueblo que hasta tienen un [Museo del Melón] (http://www.ayto-villaconejos.com/index.php?option=com_content&view=article&id=20&Itemid=19), inaugurado en 2003, que recoge utensilios, fotos y recuerdos de las familias del pueblo que hacían las maletas para buscas una tierra idónea donde sembrar.

Aparte de los melones, expuestos en casetas para su venta a kilo en la linde de la carretera, el pueblo tiene dos sitios que merecen visita: la Plaza Mayor, que se encuentra junto a la Iglesia de San Nicolás de Bari, el inmueble más antiguo de Villaconejos, de estilos barroco y renacentista e influencia herreriana.

Cómo llegar

Desde Madrid hay 56 kilómetros por la A-4 dirección Córdoba hasta la salida 37 para incorporarte al extrarradio M-305 en dirección Aranjuez (norte) y continúa por esta dirección hasta llegar a Villaconejos.

Cercedilla

Cercedilla

Paso natural del Parque Nacional de Guadarrama y a la estación de Navacerrada, se encuentra este municipio madrileño en cuya Plaza Mayor se erige la estatua del esquiador español, que fuera campeón olímpico de esquí en Sapporo’72, Paquito Fernández Ochoa. Es el vivo recuerdo de lo que significó el esquí en este municipio madrileño situado a más de 60 kilómetros de Madrid.

El esquí era tradición y formaba parte del estilo de vida de las familias, incluso de las madrileñas que establecieron en Navacerrada su estación de esquí. Su enclave privilegiado como puerta de entrada al Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, convertían a Cercedilla una localidad ideal para la práctica de este deporte invernal. Además, esta población se encontraba muy bien comunicada con Madrid, tanto que desde la Estación de Atocha al pueblo hay poco más de una hora.

La estatua de Paquito que reza “homenaje a la gente de la nieve de Cercedilla” y el museo del esquí, fundado en su honor, son dos de las visitas de obligada parada tanto a aficionados como profesionales de montaña. El museo propone un recorrido sobre objetos históricos de Paquito Fernández Ochoa, el único campeón olímpico español, así como de los deportes alpinos.

Merece la pena reservar un día completo para coger el Tren de la Naturaleza, un itinerario el aire libre que combina senderismo y viaje en tren

Este municipio serrano, que tiene sus orígenes entre el siglo I y el III (aunque no se sabe con certeza), y que cuenta con 6.781 habitantes, se encuentra rodeado por varias montañas como la Bola del mundo, La Peñota y Peña del Águila. Picos todos ellos, en los que disfrutar de unas extraordinarias excursiones de senderismo por la Sierra de Guadarrama.

Merece la pena coger el Tren de la Naturaleza, una actividad que se programa desde 1991 hasta el 1 de septiembre y acaba en el puerto de Los Cotos. El trayecto arranca en un antiguo vagón del tren eléctrico, que ha sido habilitado como sala de proyecciones. La travesía, que dura 40 minutos, combina las vistas con las explicaciones de los monitores. Tras bajar del tren, toca caminata por la zona baja de Los Cotos y Peñalara, para después regresar a Cercedilla.

También puedes escaparte por la Senda de los Miradores en un itinerario de 10 kilómetros de recorrido, que ofrece maravillosas vistas desde los miradores de Luis Rosales o Vicente Aleixandre. La senda comienza en el aparcamiento de Majavilán y concluye en la zona de las praderas Las Dehesas. Si eres de los que buscan las emociones fuertes, subiendo un poco más arriba, en Las Dehesas, puedes practicar tirolina.

Cómo llegar

Desde Madrid, toma la A-6 (Carretera de A Coruña), hasta la salida 47, dirección Guadarrama, continua por la M-614 hacia el desvío de Cercedilla.

Si llegas desde Segovia, hazlo por la CL-601 hasta el Puerto de Navacerrada y continúa por la M-601 y M-61 hasta el desvío de Cercedilla.

Toyota Touch 2 & Go, mucho más que un sistema de navegación

Descubrir estos pueblos, que aún atesoran esa esencia rural con los que disfrutar del cielo y tierra es toda una experiencia. Llegar a ellos resulta cada vez más fácil con los completos sistemas de navegación integrado del que gozan los modelos de Toyota. Bajo la denominación Toyota Touch 2 & Go encontramos uno de los sistemas multimedia más avanzados que equipa la marca japonesa.

Entre sus principales carácterísticas destacan su pantalla táctil. La conectividad Bluetooth con audio streaming.

Aunque lo que nos servirá de gran ayuda a la hora de acudir a estos lugares es cuando conectamos el sistema a un móvil. Aquí las posibilidades se multiplican, desde Google Streetview hasta configurar la pantalla para mostrar los “PDis” o puntos de interés que más nos convenga. Por ejemplo, cuando nos encontremos en nuestro destino acudir a las oficinas de turismo, lugares de interés o atracciones turísticas.

Hazte tu ruta a medida

Además, el navegador permite crear rutas con múltiples escalas que podemos almacenarlas para uso posterior. Una función de gran utilidad, si decides descubrir estos bellos lugares. Es tan sencillo, que sólo hay que elegir el destino, agregar puntos intermedios si lo hay y “seleccionar ruta”.

Los cambios de ruta, así como el desvío de segmento en ruta son dos de las características del completo navegador de Toyota

También el sistema permite realizar cambios en ruta. Por ejemplo, si conocemos un inconveniente en el trayecto a cierta distancia, pero desconocemos el mejor desvío para evitarlo, basta con utilizar la funcionalidad “Bloquear carretera posterior”.

Dicha característica hace que el sistema busque la ruta alternativa óptima para evitar un tramo a una distancia concreta, entre 2 y 20 kilómetros.

También cuenta con desvío de segmento en ruta, al que accedemos pulsando sobre "Lista de ruta" en la pantalla de opciones. De esta manera, con pulsar sobre cualquiera de los sucesivos segmentos de nuestra ruta podemos solicitar al sistema que nos desvíe para evitar ese tramo.

Por último, Toyota Touch 2 & Go incluye una base de datos de los radares de toda España, alertándonos con suficiente antelación, al tiempo que nos recuerda la velocidad máxima permitida en esa vía.

Fotos | Bea, Paul Beskow, Pablo Cabezos, M.Peinado, Tuscasasrurales, Alejandro, Marina & Enrique, Jorge Cancela

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