El coche más vendido en España se pone al día: ahora está mejor equipado, es más potente y tiene autonomía de diésel... sin ser diésel

Los tiempos en los que el Dacia Sandero estaba a la venta desde 7.200 euros quedaron muy atrás. Ahora, el utilitario rumano es bastante más caro, como cualquier coche, pero también es “más coche” y ha mejorado mucho su relación valor-precio, es decir, lo que ofrece a cambio de lo que cuesta, hasta el punto de ser uno de los modelos con mejor relación valor-precio del mercado.

Es lo que suele llamarse una compra inteligente y lo cierto es que esta estrategia le está funcionando a Dacia porque el Sandero lleva muchos años siendo el coche más vendido en España.

Renovación por partida triple: al Sandero Stepway y al Jogger también les toca

En 2025, todo apunta a que el Sandero volverá ser el líder de ventas del mercado español, y con mucha diferencia respecto al segundo, pero la marca rumana es consciente de que, a pesar de estos resultados, no puede dormirse en los laureles, especialmente ahora que la competencia china es más fuerte que nunca, por eso ha renovado la tercera generación del Sandero casi cinco años después de su lanzamiento.

No se trata de una actualización profunda, sino de una leve puesta a día que sirve para que el Sandero se mantenga al pie del cañón. Por otro lado, si algo funciona, es mejor no tocarlo, o tocarlo poco, y esa debe ser la máxima que ha aplicado Dacia a esta renovación, que afecta al Dacia Sandero y a su variante campera, el Dacia Sandero Stepway. De paso, los cambios se aplican al hermano mayor de ambos modelos, el Dacia Jogger de hasta siete plazas.

Para darse cuenta de los cambios en el exterior hay que fijarse, sobre todo, en el frontal, donde estrena paragolpes, parrilla y unos faros LED con una nueva firma lumínica.

Los pilotos traseros también tienen una nueva firma a base de LED y hay cambios en el catálogo de llantas (y tapacubos), además de nuevos colores exteriores, como el ‘Amarillo Ámbar’ metalizado del Sandero y el Sandero Stepway, mientras que el Sandero y el Jogger estrenan el tono ‘Sandstone’. De paso, las protecciones de plástico del Sandero Stepway y el Jogger pasan a ser de un material reciclado llamado ‘Starkle’, como las del Duster.

Dentro hay más cambios porque todos los modelos incorporan un cuadro digital de 7” con nuevo interfaz, así como una pantalla táctil central de 10” y cargador inalámbrico. También hay nuevas molduras, nuevas tapicerías, nuevo volante y nuevos aireadores en el salpicadero. También estrenan selector de cambio las versiones con transmisión automática. 

En el Sandero y el Sandero Stepway, esta versión es la Eco-G 120. Es una mecánica que puede funcionar indistintamente con gasolina y con gas licuado de petróleo (GLP), por lo que tiene la etiqueta ECO de la DGT, y sustituye al Eco-G 100 del modelo anterior. 

Es un motor 1.2 de tres cilindros que desarrolla 120 CV y se puede asociar a un cambio manual de seis marchas o a uno automático de doble embrague con las mismas relaciones. Además de ser más potente, incrementa la capacidad del depósito de GLP desde los 40 litros hasta los 49,6, llegando así hasta los 1.590 km de autonomía en el Sandero y hasta los 1.480 km en el Sandero Stepway (y en el Jogger).

La gama de motores del Sandero se completa con el TCe 100, un 1.0 de tres cilindros que sustituye al anterior TCe 90 y es 10 CV más potente, llegando hasta los 100 CV, siempre en combinación con una caja de cambios manual de seis marchas. El Sandero Stepway, por su parte, sigue disponible con un motor gasolina TCe 110 de 110 CV ligado a un cambio manual de seis marchas (también el Jogger) 

El Sandero, por lo tanto, sigue sin estar electrificado, mientras que el Jogger sí gracias a un conjunto híbrido (HEV), el nuevo hybrid 155 de 155 CV, que sustituye al hybrid 140 de 140 CV del modelo anterior.

Además, tanto el Sandero como el Sandero Stepway y el Jogger mejoran el equipamiento tecnológico con más sistemas de asistencia a la conducción, como el sistema de supervisión de la atención del conductor.

Estrenan también las luces de carretera automáticas, la cámara multivisión, los retrovisores exteriores con ajuste y plegado eléctricos y el botón My Safety, que sirve para acceder rápidamente (con dos pulsaciones) a una configuración personalizada de las ayudas a la conducción, por ejemplo, con el asistente de mantenimiento en el carril y el aviso de límites de velocidad desactivado. Es el mismo botón que tienen desde hace un tiempo los Renault.