Mucho ha llovido desde aquella Feria Mundial de 1964 en Nueva York, cuando se presentó el mítico Ford Mustang por primera vez, el 17 de abril. Conmemorando dicho hito, Ford lanza una edición limitada a 1.964 unidades, equipadas hasta arriba, basadas en el Mustang 5.0 V8 _GT_ (420 CV) con paquete _Performance_.
Futuros clásicos, y de los cotizados. Las opciones son mínimas, a la japonesa. Se puede escoger un tono de carrocería blanco (Wimbledon White), o uno azul (Kona Blue), además de cambio manual de seis marchas o uno automático. El resto es tal cual, _full-equipe_.
Por cierto, ese blanco es el mismo del primer Mustang que se fabricó, y al igual que el tono azul, son exclusivos de esta edición limitada. También tiene unos cuantos cromados más, que era lo que se estilaba en los años 60. Diversas insignias recuerdan que es un Mustang muy especial.
Ojo a las ventanillas traseras, son otro homenaje al original, únicas de este modelo. Hay tres capas de láminas superpuestas que se abren manualmente, como el '65 Fastback. El interior también es exclusivo, con un bitono _cashmere_ y cuero negro. En los asientos está un logotipo conmemorativo.
Dinámicamente tiene el paquete de alto rendimiento, con frenos Brembo, llantas de 19 pulgadas y neumáticos Pirelli P-Zero 255/40 R19 delante y 275/40 R19 detrás. Este paquete no estará disponible con cambio automático en los demás 2015 Mustang. Además, tendrá el diferencial trasero de deslizamiento limitado (LSD).
Son los primeros 2015 Mustang que se fabrican, así que con el tiempo su valor aumentará bastante si se conservan bien. Así se hacen los homenajes, con mucho cariño.
