Salón de Madrid 2014, así lo hemos vivido

Salón de Madrid 2014, así lo hemos vivido
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Arrancó el Salón de Madrid 2014, que aunque ya no es ningún referente en la escena internacional, tampoco se ha convertido en un simple salón de venta de coches. Tengo que retractarme parcialmente de mis declaraciones de hace unos meses. Tras haberlo visitado, debo admitir que es mejor.

Eso sí, nos podemos olvidar de cualquier primicia mundial o europea, aunque sí podemos ver por primera vez al público modelos estrenados en recientes salones del automóvil como Ginebra o Bruselas. Y hay suficientes actividades lúdicas y exposiciones para que merezca la pena ir, aunque no al nivel de las mejores ediciones.

La entrada cuesta 6 euros para mayores de 12 años, es más barata que en otras ediciones. Están ocupados los pabellones 1, 2 y 3, mas las zonas exteriores. Hay grandes ausencias, otras sencillamente inexplicables, caso de SEAT, unas marcas están representadas a nivel de concesionario y unas pocas han puesto exposiciones en condiciones.

Salón de Madrid 2014

Primer pabellón: territorio Daimler

Al entrar al salón cubierto propiamente dicho, nos topamos con una gran zona ocupada por Mercedes-Benz y smart. Lo más novedoso que podremos ver es la Clase V, que aún no se ha puesto a la venta. Está expuesta casi toda la gama, del modelo más sencillo al más ostentoso.

Se ha aprovechado la ocasión para presentar un sistema de ayuda para equipos de rescate y emergencias con códigos QR. Así los bomberos sabrán cómo rescatar a un herido de un coche sin toparse con cosas tan peligrosas como pretensores pirotécnicos o cables de alta tensión. Podrán ver las hojas de rescate estándar en un _smartphone_.

En cuanto a smart, nada que comentar. La zona está amenizada por un DJ que va pinchándose temas mientras un saxofonista le acompaña. Son 2.000 metros cuadrados de exposición, considerando la que está cayendo no es baladí. Es de largo el expositor que más espacio ocupa en la zona cubierta.

Salón de Madrid 2014

Segundo pabellón: el presente del automóvil

Gran parte del espacio está acaparada por las marcas del Grupo FCA, a nivel de concesionarios: Abarth, Alfa Romeo, Fiat, Jeep y Lancia. Primicias como tal no hay, pero se ofrecen condiciones ventajosas en la compra o extensiones de garantía, dependiendo del modelo. En las otras marcas, unas sí, otras no.

Volvo ha mostrado la última versión del Volvo V60 Plug-in Hybrid, con 215 caballos y una autonomía eléctrica de 50 km por 60.900 euritos. Además, se ha presentado una sillita infantil hinchable, especialmente útil cuando se va a usar un coche ajeno, para ir en taxi... y que cabe en una mochila. Es un proyecto aún.

Toyota no presentó novedades, pero Lexus sí. Se han mostrado los Lexus RC F, que costarán menos de 90.000 euros, y una edición limitada del Lexus IS F Sport, 25 unidades. Presentan una mejora a nivel de frenos y chasis, además de elementos estéticos en símil de fibra de carbono a base de vinilos y cuatro salidas de escape.

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Nissan ha mostrado el Pulsar a través de un mural de televisión, el coche no estaba físicamente a pesar de que se fabricará en España y que el desvelo a nivel europeo coincidía con el salón. Si no lo entendéis, yo menos. Acompañaban sus últimos _crossover_ y la e-NV200, de fabricación nacional.

De la zona de Suzuki solo cabe destacar una conversión postventa del S-Cross a GLP, que cuesta casi 2.000 euros sin contar el IVA. Honda mostró el Civic Black Edition, además del resto de su gama. Mazda trajo el único prototipo del salón, el Concept Hazumi, que anticipa el futuro Mazda2.

Hyundai nos mostró el Genesis Sedan, una berlina muy interesante de segmento E, solo se venderá con motor 3.8 gasolina y tracción total. Le acompañaba el nuevo Santa Fe y el i20 WRC. De Kia destacar el pro_cee'd GT, el restyling del Sorento, Sportage y Optima. Ambientan las series especiales con motivo del Mundial de Brasil.

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Jaguar y Land Rover, al igual que varias marcas, están representadas a nivel de concesionarios. Se han cogido una esquina donde muestran novedades recientes de producto, pero insisto, nada no visto antes. Por ejemplo, el último Discovery, el F-Type o ediciones especiales para el Defender.

Opel tiene una zona modesta, que ya es algo, porque esta marca lleva años de ausencia en el Salón. Chevrolet, por razones entendibles, no está. Si salimos fuera del pabellón 2 encontraremos zonas dedicadas a Renault, Peugeot, e Infiniti. Por cierto, la zona de Renault tiene una actividad lúdica con las Google Glass.

Inexplicables las ausencias del Grupo VAG, cuyas marcas SEAT y Volkswagen arrasan en los generalistas y Audi es la Premium más vendida. También echo de menos a Ford, que tiene fábrica en España, o a Citroën. Hay otras marcas como Mitsubishi o Subaru, que dado lo que venden, les podemos excusar, pero no a los anteriores.

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Las exposiciones de clásicos y exóticos

Afortunadamente el Salón no se termina aquí, y están repartidos a lo largo de los pabellones coches más interesantes si no nos interesa lo más moderno. Lo más antiguo que podemos ver es una exposición de Mercedes clásicos que vienen de La Cochera (Cercedilla), incluyendo el primer Patentwagen, desconozco si es réplica.

La nostalgia quedará resaltada por la zona del Espíritu de Montjuïc y de Francisco Pueche, con varias joyas como Pegaso, un Renault Alpine, unos Rolls-Royce... Tenéis fotografías de sobra en la galería adjunta. Hay desperdigados algunos cochazos como un X6 de Hamann, Porsche, Lamborghini, etc.

La revista CAR ha agrupado una pequeña colección de Aston Martin, Mercedes, Ferrari, Morgan... realmente apetecible. Soñar es gratis. En otra esquina podemos encontrar un par de Maserati y diversos recuerdos de la trayectoria de la marca. Esperad, que aún hay más.

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Menos mal que me pasé por el último pabellón, porque había un maldito tesoro. Una exposición de coches de carreras tan impactante que casi podremos imaginárnoslos en sus años de gloria. De cuando competir no era cosa de hombres, sino de auténticos chalados como Vatanen, Rohrl, Sainz, etc. Sí, el Grupo B.

La colección de Madrid Motor Days exhibe coches de circuito, Fórmula 1, el DTM, por supuesto rallies y hasta Le Mans. Merece la pena venir al Salón solo por verlos. Son 60 coches, prácticamente todos tienen una tableta cerca con sus datos más importantes y hasta vídeos. Para echar horas y horas.

Tampoco hay que perderse la pista de conducción deportiva con Ferrari F430, Audi R8... así como paseos de pago con carrazos. Habrá una exhibición de _drifting_ el sábado, y también _Free Style_. No comenté la exposición "IMOLA... New For Race", ni el espectáculo de tuning de Chip Foose, ni otros pequeños expositores que también encierran lo suyo.

Salón de Madrid 2014

En resumidas cuentas, que esperaba otra cosa... peor. Me alegro de haberme equivocado. Y el no tener que cargar con kilos de dossieres en papel, comunicados de prensa y _pendrives_ tiene su aquel, es por buscarle un punto positivo a la crisis del Salón. Recuerdo las ediciones de 2002 y 2004 y... buf, suspiro.

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