Una batalla, dos pilotos y un campeonato en juego

Una batalla, dos pilotos y un campeonato en juego
Sin comentarios

Nunca un punto había supuesto tanto. Prácticamente desde el año 2003, que yo recuerde, n se llegaba a Gales con todo prácticamente sin decidir. En aquella ocasión fue Petter Solberg el que ganó la partida a los dos pilotos de Citroën en aquella época, que no eran otros que Carlos Sainz y Sébastien Loeb. De esa forma el noruego conseguía su primer y hasta ahora único titulo en el Mundial de Rallyes. Este año solo ha cambiado uno de los protagonistas ya que tan Loeb como Solberg sigue involucrados en la trama de esta película.

El francés es uno de los dos actores principales. Tras agradecer en gran parte el trabajo realizado por Dani Sordo en Cataluña depende de si mismo y de su capacidad de obtener un buen resultado. Y es que no debe ser fácil tampoco ceder una victoria que estaba prácticamente asegurada delante de tu propia afición. En esta ocasión digo que depende de si mismo ya que a Dani tampoco es que le hayan gustado demasiado las superficies muy deslizantes y la verdad es que en Gales a finales de octubre lo que se dice sol, se ve poco.

Ahí es cuando entra en pantalla Petter. No nos engañemos, el noruego ha vuelto y lo ha hecho por todo lo alto. La velocidad de acoplamiento al C4 demostrada ha sido impresionante. Ya lo demostró en Cataluña con varios sratch durante la jornada del domingo y en Gran Bretaña promete dar a más de uno una sorpresa. Sobre todo por a Solberg siempre se le ha dado muy bien esta prueba, sobre todo porque tiene grandes recuerdos del año que consiguió el cetro Mundial.

Por supuesto Mikko Hirvonen es el otro protagonista de todo esto y bien seguro que tiene mucho que decir. Al finlandés también le apasiona esta prueba ya que en cuanto a la superficie es semejante a la de la tierra en que nació. En 2007, cuando el Campeonato ya estaba en manos del francés de siempre, Mikko se llevo una gran victoria a pesar de tener que lidiar con unas condiciones de pista imposibles y de además tener varios sustos por el camino.

Sin embargo la referencia más cercana la tenemos en el año pasado. Allí Loeb arrasó sin miramientos en una prueba que tan solo Citroën se jugaba el campeonato de marcas ya que “Seb” ya había hecho su trabajo unas semanas antes en Japón. Este año en cambio será la cosa diferente. Los dos pilotos saldrán muy presionados, sabedores de que cualquier error, ya sea mecánico o de ellos mismos, les puede dejar fuera de la definitiva lucha por el campeonato.

Las cuentas al respecto son muy sencillas. Los dos dependen de si mismos. Con quedar por delante del otro les es suficiente. En el caso de Loeb si queda por delante y en los dos primeros puestos le permitiría ganar su sexto campeonato consecutivo por un punto mientras que si queda a partir del tercero, y siempre por delante de Mikko, ganaría por el número de victorias conseguidas durante la temporada. Seis en contra de las 4 conseguidas por el piloto de Ford. En cuanto a Hirvonen quedar por delante será suficiente para cumplir su sueño, ser Campeón del Mundo de Rallyes.

Temas
Comentarios cerrados