No, no os habéis equivocado, ni esto es Moto22 ni nosotros vamos a montar un duelo por ver quién pone el video más chiflado como L.Font y Morrillu. Simple y llanamente porque no lo necesito, lo que os traigo hoy se lleva la victoria sin necesidad de que se presenten sus rivales. Os pongo en circunstancias, hace un par de semanas daba comienzo en Oulton Park la temporada 2010 del Trofeo Abarth 500.
Básicamente se trata de un campeonato monomarca en el que los pilotos intentan sacar el máximo rendimiento de estas particulares “pelotillas” racing. A veces incluso hasta límites insospechados. Benny Simonsen comenzaba la segunda carrera con un muy buen sabor de boca tras su tercer puesto en la primera manga. Sin embargo este danés prácticamente desconocido quería más y ni sus rivales, ni las leyes de la física iban a poder evitarlo.
El Fiat 500 Abarth con el numero 22 de nuestro protagonista se encontraba rodando en cabeza cuando ya encaraba la recta final de la segunda carrera. Detrás suyo el incomodo Gareth Howell le estaba presionando y poniéndole la cosa muy difícil. Tanto es así que Simonsen cruzaba demasiado el coche en la frenada después de meta y se dirigía totalmente de lado hacia el piano. ¿El resto? Lo debéis descubrir vosotros mismos.
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