El Dakar está a la vuelta de la esquina, y por primera vez en la historia un español defenderá el título en la categoría de coches. Carlos Sainz ha mostrado sus ganas de luchar por la victoria en la edición 2011, y reconoce que tratará de repetir con la misma estrategia y respeto que en los años anteriores.
Reconoce que la estrategia no será otra que salir a tope desde los primeros compases y si surgen problemas, en el Dakar todo puede pasar, aceptarlos, tratar de minimizarlos los daños y que éstos afecten los menos posible. Con paciencia se puede recuperar el tiempo perdido poco a poco. A fin de cuentas, en el Dakar nadie se salva y, al menos, un día malo lo suelen tener todos los participantes.
Como no podría ser de otra manera, el tema de las órdenes de equipo y su lucha con Nasser Al-Attiyah también estuvo presente en las preguntas. Sainz no quiere ni oir hablar de polémicas y como afirma, todos son mayorcitos. Sin lugar a dudas, y con el permiso de los BMW X3 de X-Raid, los Volkswagen Race Touareg volverán a ser los principales favoritos y de entre sus pilotos debería salir el campeón.
El año pasado sabía que mis rivales estaban en mi equipo y pensaba que habría órdenes de Volkswagen. Por eso quería ir primero, pero no las hubo por eso quería ir el primero de mis compañeros. Pasaron los días y nunca llegaron. De todos modos me alegro porque gané. Ahora sé que este año tampoco habrá
Vía | Europapress
