La mítica subida a Pikes Peak tenía que haberse celebrado durante el mes de julio, pero los incendios en la zona han obligado a retrasarla hasta el 12 de agosto, que es la nueva fecha fijada. Este año habrá muchos coches eléctricos que participen, pero pocos como este BMW M3 E36.
El mítico coche deportivo del año 1995 ha pasado por las manos de los preparadores EV West, en California para adaptarse a las indicaciones del reglamento de la prueba y poder participar así en la categoría de coches eléctricos, una de las más competidas.
La modificación más importante por supuesto ha sido la sustitución del motor de seis cilíndros por un motor eléctrico capaz de generar energía equivalente a 420 caballos de potencia. No olvidemos que los BMW M3 E36 más potentes desarrollaban 321 CV, con lo que éste eléctrico ya supera al modelo original.
Por lo demás, además de aligerar el interior, ponerle unos baquets y unas barras antivuelco, el coche no tiene demasiados cambios. El gran alerón en la parte posterior es una de las características de todos los coches que participan en Pikes Peak y que necesitan una buena aerodinámica que les mantenga pegados al suelo.
Su piloto será Bill Caswell, especialista en rallies que ha alucinado cuando ha podido probar por primera vez el coche. Lo que más le ha impresionado ha sido la forma con la que entrega la potencia, con mucho par desde bajas revoluciones capaz de hacer que las ruedas se queden marcadas sobre el asfalto a la primera de cambio.
Estaremos atentos al resultado que consigue este coche tan especial el día 12 en Pikes Peak, pero a priori será una de las principales atracciones de su categoría. Además estoy seguro de que hablaremos mucho más de EV West, ya que entre sus creaciones hay otras en marcha tan curiosas como un Porsche 912.
