Recientemente hemos sabido que los alemanes de BMW, Mercedes y Audi están cosechando buenos resultados de ventas en el país oriental.
Los de Münich duplicaron sus ventas en el primer semestre, en comparación con el año pasado, superando las 75.000 unidades, mientras que Mercedes señala a China como su mercado más importante para 2015. Sin embargo, es Audi la marca destacada en cabeza, y la explicación no sólo proviene de la calidad de sus coches.
En Ingolstadt montan en sus vehículos cuatro aros en la parte delantera, y cuatro más en la trasera. Ocho aros que podrían ser la clave para suscitar las supersticiones de un pueblo obsesionado con ese número. ¿Por qué?
El número ocho, pronunciado en chino (ba), suena de manera semejante a “enriquecimiento”. Esto ha provocado históricamente la relación con de esta cifra con buenos augurios y suerte.
Curiosamente, esta costumbre parece concitar también el interés de la administración. Tanto es así, que los Juegos Olímpicos de Pekín fueron inaugurados a las 8 horas, 8 minutos, 8 segundos del octavo día de agosto de 2008.
Y no es el único ejemplo. La astrología china cuenta con ocho signos, como los ocho ministros imperiales que conforman el gobierno, los ocho puntos cardinales con los que se orientan, y las ocho montañas cósmicas que adoran. Los números telefónicos y matrículas más caros llevan el número, y las parejas se casan masivamente en ese día.
Aún así, también hay que decir que como en tantas otras supersticiones, es posible que se crea lo que se quiere creer. Y es que por el contrario, el número 4, cuya fonética recuerda a la palabra “muerte” está proscrito en la sociedad china. ¿Hubieran sido un fracaso de ventas los Audi de no añadir tambíen su símbolo en el maletero? ¿Y si los chinos contaran los aros insertados en el volante?
Más allá de la anécdota, es completamente cierto que el marketing y la imagen de marca juegan un papel fundamental en las ventas de una compañía. En este caso Audi parece estar siendo beneficiado por la numerología, pero la razón de fondo es que la sociedad china vive momentos de expansión económica en los que la clase media toma protagonismo como agente del mercado.
Vía | Yahoo, ViajarAsia
En Motorpasión | Audi podría tener fábricas en Estados Unidos y China
